Existencia callada en justa medida,
ponderado, ecuánime.
Siempre has estado ahí, sin ruido,
contemplando avatares de vida, propias y ajenas.
Amigo, antes que parentesco, que por impuesto no hace
el efecto.
Guiándome por el camino de la prosa,
ejercicio de lo mas placentero, aunque para mi nuevo.
Siento gozo por la sencillez y profundidad de tus
poemas.
Que ninguna tortuosa fuerza te detenga,
ni física, psíquica o personal,
Sigue, sigue llenando cuartillas de amor y
sensibilidad,
oasis de reflexión y paz,
tan necesarios en turbulentos tiempos.
¡GRACIAS DON EMILIO!
Nota: éste Poema ha sido compuesto por Miguel Muñoz Guiró, primo y amigo. Abusando de su buena disposición, le he pedido su permiso para incluirlo en éste Blog y él, amablemente, ha aceptado. Gracias, Miguel.
Deseo que os parezca tan bueno, como me lo ha parecido a mí.
Saludos.
Deseo que os parezca tan bueno, como me lo ha parecido a mí.
Saludos.